CALMA

Calma. Desde hace un tiempo a esta parte he encontrado diferentes actividades que me permiten sentir cómo mi alma se completa. Noto que voy creciendo como persona. Sin embargo, no me había dado cuenta pero todas esas ocupaciones han hecho que mi ritmo de vida haya aumentado. Siempre hay algo que hacer, algo pendiente, algo programado o algo necesario para el día siguiente. No quiero tener un ritmo frenético de vida en la que apenas tenga tiempo para pararme a pensar qué estoy haciendo.

Me encuentro en una etapa muy feliz. No me falta nada y quiero poder disfrutar plenamente de esta etapa. Quiero ser consciente del momento que estoy viviendo. Por eso, calma. Tengo que continuar realizando todas esas actividades que he ido descubriendo pero sin dejar que se conviertan en una obligación a realizar.

Estoy muy cerca de encontrar mi punto de equilibrio. Lo presiento. Y estoy orgulloso de todo el camino que he tenido que recorrer hasta llegar a este punto. Pienso que no hay que dejarse llevar a ciegas por el ajetreado ritmo de vida que llevamos en las ciudades. Debemos pararnos a pensar. ¿Qué estoy haciendo? ¿Para qué lo hago? ¿Me hace feliz o me va a ayudar a serlo?

En muchas ocasiones no nos damos cuenta, nos dejamos influenciar por nuestro entorno y terminamos consumiendo nuestro tiempo en actividades que solo sirven para “mantenernos ocupados”. No perseguimos ningún fin con ellas ni tampoco nos hacen genuinamente felices. Nos hacen entrar en un estado de stand-by.

Por eso detente un día, una mañana o una tarde. Dedica unas horas a ver de la forma más objetiva posible el rumbo que ha tomado tu vida. ¿Realmente es la idea que tenías años atrás? Puede que tuvieses unos objetivos que se han ido volviendo más y más borrosos con el paso del tiempo y sin darte cuenta tus acciones ya no te están acercando a ellos. Por eso, calma.

Aburrirse de vez en cuando no es nada malo. De hecho, viene bien para meditar sobre estos asuntos.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

MUERTE

Carta de despedida (desamor)

DEMONIOS